El bloque de diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) quedó en una situación crítica después de que el presidente Javier Milei lograra blindar el veto a la ley de financiamiento universitario. Es que el grupo de radicales díscolos que había auxiliado a la Casa Rosada en la votación para dejar firme la impugnación de la reforma jubilatoria volvió a desmarcarse de la bancada que conduce Rodrigo De Loredo para defender la posición del oficialismo en la discusión sobre el aumento de partidas presupuestarias para la educación superior.